La Selección Colombia cerró con broche de oro las eliminatorias rumbo al Mundial 2026, tras golear 6-3 a Venezuela en un partido cargado de emociones, goles y contrastes. Mientras el conjunto tricolor celebró su gran cierre con una actuación memorable de Luis Suárez, la Vinotinto vio cómo se le escapaba la oportunidad histórica de clasificar por primera vez a una Copa del Mundo.
El duelo comenzó con tintes de esperanza para Venezuela, que necesitaba ganar y esperar un tropiezo de Bolivia para acceder al repechaje. Apenas al minuto 3, Segovia abrió el marcador, despertando la ilusión en el público vinotinto. Sin embargo, Colombia respondió rápido con un cabezazo de Yerry Mina al 10, aunque Joseph Martínez, aprovechando un error del arquero Kevin Mier, volvió a adelantar a los locales al 12. El ida y vuelta mantenía vivo el sueño venezolano, hasta que Luis Suárez apareció al minuto 42 para empatar el partido justo antes del descanso.
La segunda mitad fue una exhibición del delantero del Sporting de Portugal. Con tres goles consecutivos a los minutos 50, 59 y 67, Suárez se consagró como la figura absoluta del encuentro, respaldado por las asociaciones de James Rodríguez, Luis Díaz y Richard Ríos. Aunque Salomón Rondón descontó al 76, la respuesta colombiana fue inmediata: John Córdoba, quien ingresó por Suárez, selló el 6-3 definitivo apenas dos minutos después tras una asistencia de Juan Fernando Quintero.
El golpe para Venezuela fue doble. Además de la derrota, Bolivia logró lo impensado y venció 1-0 a Brasil con un gol de penal, asegurando el repechaje y dejando a la Vinotinto sin el ansiado boleto mundialista. Para los bolivianos, será la oportunidad de volver a una cita orbital después de 32 años.
Colombia, por su parte, cerró la eliminatoria en la tercera posición con 28 puntos, tras conseguir los seis en la última doble fecha. Más allá de la goleada, la Selección dejó una sensación de confianza renovada y esperanza de cara a lo que será su participación en la próxima Copa del Mundo, ilusionando a millones de aficionados que celebran la gran despedida del equipo en la ruta clasificatoria.