La Selección Colombia atraviesa un momento en el que la experiencia pesa más que la juventud. De los jugadores claves en la actualidad, varios ya superan la barrera de los 28 años, lo que ubica al equipo con un promedio de edad de 30 años exactos en la plantilla que más continuidad ha tenido en la última etapa.
Futbolistas como James Rodríguez (34), Camilo Vargas (36), Yerry Mina (30) y Dayro Moreno (39) representan el lado más veterano de la nómina, mientras que otros como Luis Díaz (28), Davinson Sánchez (29), Jhon Lucumí (27), Luis Javier Suárez (27), Kevin Mier (25) y Richard Ríos (25) equilibran con una edad que aún los mantiene en plena madurez futbolística.
De cara al Mundial 2026, que se disputará entre el 11 de junio y el 19 de julio, todos estos jugadores llegarían con un año más en su hoja de vida: James lo hará con 35, Camilo Vargas con 37, Mina con 31 y Dayro Moreno con 40, lo que resalta aún más la veteranía que acompaña a la selección. Por su parte, Díaz tendrá 29, Davinson 30, Lucumí 28, Suárez 28, Mier 26 y Ríos 26.
En comparación con selecciones como Brasil, Argentina o Uruguay, que han logrado combinar experiencia con la irrupción de jóvenes figuras, Colombia refleja un promedio de edad más alto. Esto se debe a que los jugadores que hoy marcan diferencia ya están consolidados en sus carreras, son futbolistas de recorrido internacional y con una trayectoria que respalda su presencia en la selección, aunque esto incremente el promedio.
Vale resaltar que, en la más reciente convocatoria, no aparecieron nombres jóvenes de proyección como Yaser Asprilla, Gustavo Puerta o Jhon Durán, todos menores de 22 años. Si bien tienen condiciones y talento para aportar en el futuro, aún no logran consolidarse en sus clubes para ganarse un lugar estable en el equipo nacional.
El debate está abierto: ¿apostar por la experiencia inmediata para competir en el próximo Mundial o acelerar el proceso de recambio generacional que permita a Colombia sostenerse en la élite a largo plazo?